
No sé si es por causa del momento en el que estamos viviendo, pero lo cierto es que parece que resurge el “hazlo tú mismo”. Motivado o no por las cuestiones económicas, me alegro mucho de que volvamos a desempolvar libros de recetas, saquemos del baúl de los recuerdos agujas de tejer y lana, nos acerquemos a las tiendas de manualidades o simplemente nos esmeremos por arreglar y reciclar utensilios a los que hace poco hubiéramos enviado rápidamente a la otra vida.
Internet es un precioso escaparate para todos los amantes del mundo DIY (do it yourself), dónde se comparte información acerca de cómo hacer esto o aquello, intercambiar creaciones, ideas o simplemente mostrar que con un poco de tiempo e imaginación podemos hacer cualquier cosa sin tener que pasar por la caja registradora.
Ya era hora de liberar y potenciar esa vena creadora y creativa que todos llevamos dentro y de mostrar que no somos tan inútiles como esta sociedad, en que todo está “listo para consumir”, se empeña en hacernos creer.
1 comentario:
Me encantaría poder ser una manits! Pero para lo único que tengo mano s para la cocina!!!
Envidio (sanamente!) a la gente que coje una caja de la basura y se hace un mueble de lo más original!
Yo una vez lo intente.... y alguien todavía se está riendo de mi... soy una chapuzas de primera!
msr
Publicar un comentario